29 de agosto de 2010

Las crateras de la energía

En la ciudad de La Plata puede verse que en las azoteas de los edificios más antiguos hay elementos decorativos como vasijas, cántaros, redomas o cráteras; también están presentes en el Paseo del Bosque, en jardines y plazas e incluso dentro de edificios públicos como la Casa de Gobierno o el Palacio Municipal.

En el libro “La historia ocu
lta de la Ciudad de La Plata”, Gualberto Reynal cita a Chevalier quien dice que “El hecho de que la vasija esté abierta por arriba indica receptividad a las influencias celestes” y relaciona esta definición con la idea de que las vasijas y crateras de las que hablé deberían contener agua, pero por lo que afirma Reynal “al estar tapados, esos adornos no recepcionan tales influencias celestes y al no penetrar el agua, no entra vida y donde no hay vida… prevalece la muerte” [sic]. También sostiene que la función de receptores de energía que tendrían todos estos adornos, cumpliría la función de “contrarrestar las influencias negativas, que actuarían contra el crecimiento de La Plata y la felicidad de sus habitantes” [sic].

La misma teoría sostiene Marco Arios, la cual cito a continuación: “Es importante, por ejemplo, el elemento líquido, que es un elemento pesado, muy fuerte, se produce una buena descarga de la energía, y lo tenemos en donde debería ir, que es en los jarrones que están dentro de la municipalidad, fuera y en las plazas, por ejemplo en la Plaza Moreno. Ahí tendría que haber agua. También en los jarrones que están en el Bosque. En todos esos lugares tendría que haber agua, y no hay agua: han puesto tierra con plantas; se creen que son maceteros. No, ahí tiene que haber agua. Ahí sí, esas cosas sí pueden producir algo, descarga, porque están presentes los cuatro elementos siempre, en toda la ciudad de La Plata. Si hay una carga, física incluso, porque produce una especie de electrólisis en el ser humano: el ser humano tiene nervios y la mayoría de su peso es todo líquido, y bueno, eso es todo electricidad, son todos impulsos químico-eléctricos. Y el agua, colocada en jarrones de hierro, bueno, ya la conocemos desde la época antigua, en todas las construcciones de Grecia, de Roma; la conocemos incluso de la Biblia, como ese inmenso ‘mar de bronce’ que estaba en la puerta del Templo de Salomón. Hay una carga energética, muy positiva, que se logra en esa agua a través incluso de la luz del sol que le da, porque la carga positiva es el sol; lo negativo es la materia, el hierro, y produce un magnetismo muy especial en todos los objetos que se sumergen adentro”.

Por mi parte no soy de creer
en esto de que unos simples elementos arquitectónicos y adornos tengan una función de contrarrestar posibles influencias negativas, o atraer energías de cuerpos celestes; me parecen teorías sin fundamentos y muy supersticiosas. Pero historias como estas hay muchas en La Plata, y por eso cito textualmente las distintas creencias para que también ustedes opinen cuanto puede haber de cierto en todo lo que se dice de la ciudad de las diagonales.

Fotos:
1. Jarrones en las escalinatas del Palacio Municipal.
2. Jarrón en 47 y diagonal 76.
3. Unos de los más famosos que están a orillas del lago en el Paseo del Bosque.
4. Este muy similar a los del bosque, está en la Plaza San Martín de Mar del Plata.

Fuentes:
“La historia oculta de la ciudad de La Plata”, Gualberto Reynal
“La Plata esotérica: La revelación final de los masones”, C.O.R.
Programa de Inventario y catalogación de Esculturas en espacios públicos en la ciudad de La Plata Secretaria de Cultura, Municipalidad de La Plata

26 de agosto de 2010

La casa de los 40 días

Durante el segundo aniversario de la ciudad, Dardo Rocha y el gobernador D’Amico junto a otro grupo de funcionarios salieron desde la iglesia San Ponciano para recorrer la ciudad y ver cómo iba avanzando la edificación en la zona. Al llegar al descampado que era Plaza Moreno por aquellos días, observaron cómo se iba poblando de construcciones, entre las cuales estaban el Palacio Municipal y la Catedral de La Plata. Pero les llamó la atención que había un enorme terreno baldío frente a la plaza, entre las calles 13, 14, 49 y 50, el cual pertenecía justamente a Dardo Rocha.

Nadie podía creer que el
fundador no tuviera una vivienda en la ciudad que había creado, y muchos tomaron esto como una falta de fe hacia la ciudad de La Plata. Por eso el Dr. Dardo Rocha hizo una apuesta con el gobernador D’Amico y lo invitó a comer un asado en la casa que todavía no existía, para el 1 de enero de 1885. Esa misma noche, Rocha se contactó con el ingeniero Pedro Benoit, quien en tan solo unas horas trazó los planos para esta casa, cuya construcción comenzó al día siguiente.

Se dice que los obreros trabajaron día y noche para poder finalizarla a tiempo, y que incluso las paredes se terminaron de secar al calor de las brasas del asado… pero finalmente Dardo Rocha ganó la apuesta y construyó su casa en tan solo 40 días, de ahí el nombre.

Esa casa antiguamente ocupaba la mitad de la manzana, y tras ser heredada por los descendientes de Rocha se dividió y la mayor parte fue demolida. Actualmente sólo se conserva la “Casa Chica”, donde funciona el Museo Dardo Rocha.



Fotos:
1. Dardo Rocha, fundador de la ciudad de La Plata.
2. Antigua foto de la casa, en la esquina de 14 y 50.
3. Foto actual de la Casa Chica, donde está el Museo Dardo Rocha.

Fuentes:
“La casa de los 40 días”, por el blog Palacio Achinelly
Foto de la página “La Plata mágica”
“La Plata cultural”, diario La Nación, 2/8/2009

21 de agosto de 2010

¿Cómo determinar las calles mediante cálculos?

Posiblemente muchos ya lo sepan, pero me pareció algo curioso e interesante para comentarlo en el blog, y es que otra de las particularidades que se logró al diseñar el trazado de La Plata es que haciendo unos cálculos sencillos se puede saber entre que calles queda una casa, si se conoce la calle y el número de la vivienda. Este sistema funciona dentro del cuadrado platense de 1 a 31, y de 32 a 72.

  • Calles paralelas a 7:
A primera cifra (o a las dos primeras) del número de la casa, se las multiplica por 2 y luego se le suma 32. Si el resultado es mayor a 52, también se le suma 1.
Ejemplo 1: Calle 11 Nº315. 3 x 2 = 6 + 32 = 38 (queda en calle 11 entre 38 y 39)
Ejemplo 2: Calle 8 Nº1315. 13 x 2 = 26 + 32 = 58 + 1 = 59 (queda en calle 8 entre 59 y 60)

  • Calles paralelas a 50:
A primera cifra (o a las dos primeras) del número de la casa, se las multiplica por 2 y luego se le resta 5.
Ejemplo 1: Calle 57 Nº720. 7 x 2 = 14 – 5 = 9 (queda en calle 57 entre 9 y 10)
Ejemplo 2: Calle 57 Nº1720. 17 x 2 = 34 – 5 = 29 (queda en calle 57 entre 29 y 30)

  • Diagonales 73, 74, 79 y 80:
A la primera cifra se le resta 5.
Ejemplo: Diagonal 80 Nº750. 7 – 5 = 2 (queda en diagonal 80 entre 2 y 3)

  • Diagonales 75 y 76:
A la primera cifra se le suma 14.
Ejemplo: Diagonal 75 Nº400. 4 + 14 = 18 (queda en diagonal 75 entre 18 y 19)

  • Diagonales 77 y 78:
A la primera cifra se le suma 1.
Ejemplo: Diagonal 78 Nº200. 2 + 1 = 3 (queda en diagonal 78 entre 3 y 4)


Aprender este sistema para ubicarse es solo cuestión de práctica y memoria, aunque se lo pueden imprimir para guardar en la billetera o descargar este software a la computadora o al celular que realiza los cálculos por nosotros y nos dice la dirección exacta.



Otras entradas de interés:
* Benoit y el plano usado en París
* La ciudad de Julio Verne
* La verdadera historia del trazado platense
* La divina proporción
* La diagonal de la vida
* El temido número 13
* Otro símbolo oculto: El árbol de la vida
* ¡666 por todas partes!
* ¿El Palacio Municipal está "de espaldas" a la Catedral?
* Las hermanas de La Plata (parte I)
* Las hermanas de La Plata (parte II)
* Desapariciones en el trazado platense
* La "otra ciudad" diseñada por Benoit en La Plata

17 de agosto de 2010

Un túnel en 1 y 59

El mecánico Herminio Minoli vivía en avenida 1 entre 58 y 59, en una de las pocas edificaciones que había allí hacia 1932. El día 11 de septiembre de ese año, luego de terminar su jornada laboral decidió irse a dormir temprano; así que cerró la casa (dejando puesta la llave en la puerta que daba a la calle), cruzó el pequeño jardín y fue a su habitación.

Su sueño
se vio interrumpido a eso de las 4:00 de la mañana por unos ruidos extraños, pero les restó importancia y siguió durmiendo. Se levantó a las 6:00 como todas las mañanas y después de cambiarse y desayunar tranquilamente, cruzó el jardín delantero para salir a la calle e ir a su trabajo. Pero antes de llegar a la puerta quedó desconcertado por lo que vio. Había dos montículos: uno de tierra recién extraída y otro de ropas viejas. Se acercó y pudo observar que la tierra era de un boquete en medio de su jardín, que bajaba unos metros y continuaba hacia una especie de túnel. Todo esto lo había dejado perplejo y necesitó un momento para recapacitar. Ni bien comprendió que era lo que había ocurrido, cruzó corriendo la avenida 1 hasta la Cárcel de Encausados que estaba enfrente y dio aviso al oficial de turno: había ocurrido una fuga.

La Cárcel de Detenidos y Encausados se había trasladado a la Penitenciaría que estaba funcionando en 1 entre 58 y 59, en un edificio construido originalmente para que funcione allí una escuela de artes y oficios. Pes
e a que se le realizaron grandes modificaciones para su nueva función, no se pudo revertir la falta de seguridad que tenía ese edificio por tener un subsuelo. Esto quedó demostrado tan solo unos meses antes de la fuga: El 15 de enero un hombre pasaba caminando por la vereda de la cárcel a las 4:45 de la mañana, y notó que desde una rejilla que comunicaba el subsuelo con la calle se escuchaban ruidos y se había desprendido parte del revoque; rápidamente avisó al guardia, y descubrieron que diez reclusos del Pabellón 1 habían cavado un túnel de 1,5m de profundidad desde sus celdas hasta el subsuelo, pero afortunadamente lograron detenerlos antes de que escaparan.
Ese intento de fuga parece que no alcanzó para que se mejoraran las medidas de seguridad, ya que la evasión del 12 de septiembre necesitó meses para prepararse. Los presos se levantaban a las 7:00 para salir de sus pabellones e ir a los talleres o patios generales, pero esa mañana no fue así. Los guardias del pabellón todavía no habían sido alertados de la fuga, por lo cual continuaron con su rutina diaria y fueron a despertar a los reclusos a las 6:50 am. Les resultó muy extraño que nadie despertara incluso después de que uno de ellos sacudiera las camas, y la sorpresa llegó cuando levantaron una de las sábanas: Todos los reclusos eran muñecos hechos con ropa vieja, que habían sido cuidadosamente colocados de forma que pareciera que todos estaban durmiendo. Inclusive usaron cabellos reales para tapar las cabezas de tela.
Esta fuga masiva no tardó en ser noticia, y las autoridades emprendieron una búsqueda de los 33 recluidos que habían escapado, los cuales eran 1/6 de la población total del penal. Aunque todos fueron recapturados en los días y semanas siguientes, lo que más llamó la atención fue la astucia con la que lograron engañar a los guardias para conseguir su libertad. El túnel de casi 100 metros de largo atravesaba varios pabellones y oficinas de la cárcel, para luego cruzar la avenida 1 y terminar en el jardín de la casa de Herminio. El boquete de entrada se había hecho con un cortafierros en el piso de hormigón Portland del pabellón y tenía una profundidad de 1,5m. Desde allí se iba al túnel iluminado con varias luces, ya que los reclusos trabajaron durante las noches para no ser descubiertos. Además utilizaban fuelles para procurarse aire y se turnaban los trabajos, usando una barreta para cavar y una olla para retirar la tierra.

La muestra final de la libertad que tuvieron para planear su escape, fueron los “recuerdos” que les dejaron a sus vigilantes. Antes de abandonar el pabellón escribieron “se algila” en papel de envolver, y colgaron ese cartel como burla ya que el lugar había quedado deshabitado. También pusieron cerca del túnel una leyenda que decía “paso de los libres”.



Fotos:
1. Foto de Herminio Minoli.
2. En esta foto se ve la salida del túnel que apareció en su jardín, junto al montículo de ropa que dejaron los prófugos.
3. Aspecto actual y antiguo de la Penitenciaría de 1 y 59.
4. La foto de arriba muestra la trayectoria del túnel por debajo de avenida 1, y la de abajo es la barreta usada para cavar.
5. A la izquierda un policía contempla los falsos cuerpos de trapo que hicieron los presos para simular que estaban durmiendo, y a la derecha la entrada al túnel en el piso del pabellón.
6. Algunos de quienes lograron evadirse de la cárcel.
7. Carteles que dejaron como burla hacia quienes debían vigilarlos.

Fuentes:
“Por un túnel se evadieron 33 recluidos, de la Cárcel de Encausados de La Plata”, Diario El Día, 13/9/1932
“Varias declaraciones recibió el juez en la Cárcel”, Diario El Día, 14/9/1932
Información del Museo policial “Inspector Mayor C. Vesiroglos”

10 de agosto de 2010

El temido número 13

El número 13 se ha asociado desde tiempos antiguos con la mala fortuna y por eso muchas personas supersticiosas tratan de evitarlo; por ejemplo a la hora de realizar un viaje un día 13, ir a una reunión con 13 personas o designar a un objeto como el número 13. Pero también esta creencia mística se puede ver en La Plata ya que hay muchos que consideran de mala suerte el hecho de que la avenida central de la ciudad, sea justamente la avenida 13.

En el libro “La historia oculta de la ciudad
de La Plata”, Gualberto Reynal se basa en esta creencia para dar una visión negativa del plano de la ciudad, citando que ese número “es de mal augurio”, “es el símbolo de la infidelidad y la traición”, y recordando que en la Biblia el Capítulo 13 es el Apocalipsis que predice la llegada de el anticristo. Reynal no menciona solamente el 13 de esta avenida, sino que da varios ejemplos más:
  • Los obeliscos se relacionan con el Antiguo Egipto, y en La Plata hay uno en diagonal 80 y calle 50. Si sumamos esos números: 8+0+5+0=13
  • La libreta de enrolamiento de Dardo Rocha es la Nº 13.
  • “La Plata” comienza con la letra L que es la Nº 13 del abecedario.
  • Rocha pasó por la ciudad antes de que se fundara, fue el día 13 de noviembre de 1882.
  • Al sumar los número de la esquina de 5 y 53: 5+5+3=13
  • Dejando de lado la avenida 51, alrededor del Palacio Municipal también están la avenida 53, calle 11 y calle 12. Si sumamos los números: 5+3+1+1+1+2=13
  • Tanto en la esquina de 12 y 51 como en 12 y 53 (ambas frente a Plaza Moreno) la numeración de las casas llega hasta el número 850. Y haciendo cuentas: 8+5+0=13
  • Mirando el plano de La Plata se encuentran varias “escaleras del 13”. Por ejemplo en 8 y 32: 8+3+2=13. O en 7 y 33: 7+3+3=13; también en 6 y 34, 5 y 35, 4 y 36…

Desde mi punto de vista, todos estos números 13 son solamente supersticiosos y no tienen nada de especial, ya que en cualquier ciudad con calles numeradas podrían hacerse cálculos como estos para hallarlos en alguna esquina sin que eso encierre un significado en particular.

En cuanto a la avenida 13, los que sostienen que es de mala suerte olvidaron que el plano fue diseñado por masones, y que si lo diseñ
aron de esa forma es porque para ellos este número tiene un significado muy diferente. El 13 para la masonería es un número bueno ya que significa la transformación: Este es el fin que buscan los masones, el de transformarse de simples mortales a hombres iluminados que conocen los secretos. Uno de los ejemplos más conocidos de la simbología masónica del número 13 es el billete de 1 dólar: La pirámide al reverso del billete tiene 13 escalones, y el águila sostiene en una de sus patas 13 flechas y en la otra una rama con 13 hojas y 13 frutos. Además el escudo en su pecho tiene 13 barras y encima de ella hay 13 estrellas.


Fotos:

1. Cartel de la avenida 13.

2. Obelisco en diagonal 80 y calle 50.

3. Mapa de la ciudad en donde está marcada la avenida 13.

4. Reverso del billete de 1 dólar, donde los números 13 si fueron colocados a propósito por su significado para los masones.


Fuentes:

“La historia oculta de la ciudad de La Plata”, Gualberto Reynal

“El 13: ¿Número de mala suerte?”, Mario López

“La Plata esotérica: la revelación final de los masones”, C.O.R.

7 de agosto de 2010

El primer túnel reabierto en La Plata

De todos los supuestos túneles que mencioné hasta ahora, el que se encuentra en la plaza Islas Malvinas es el único del cual se conocía su existencia desde hace tiempo, y pudo ser reabierto hace poco gracias al grupo "Túneles en la ciudad de La Plata".

El mismo data de la época
en que existía allí el Regimiento 7, que se instaló en La Plata en el año 1917. Pasaba por debajo de lo que sería avenida 51, comunicando según Roberto Abrodos, un edificio con el depósito de municiones; aunque según la nota del Diario El Día de fecha 29/3/2010 en realidad unía la Plaza de Armas con el Casino de Oficiales.
En el libro “La historia oculta de la ciudad de La Plata”, Gualberto Reynal muestra fotos de los accesos a este túnel, que fueron cerrados para luego demolerse el antiguo Regimiento 7 y construirse allí la plaza Islas Malvinas en la década de 1990. Reynal también plantea la posibilidad de que este túnel se comunique con el que correría por debajo de la avenida 51.
Luego de estar cerrado durante años, este pasaje subterráneo pudo ser recuperado a principios del año 2010. Como se detalla en el blog “Túneles en la ciudad de La Plata”, al abrirlo e ingresar dentro se encontró que en las escaleras de acceso había mucha tierra acumulada y en la parte baja tenía un gran nivel de agua acumulada. Durante varias semanas se trabajó limpiando y rep
arando las filtraciones de agua, luego de extraerla con bombas colocadas en la plaza.
Las dimensiones del túnel son de 46 metros de largo, 2,50 metros de alto y 1,65 metros de ancho. Actualmente se planea construir allí un pasaje cultural que sirva como otro atractivo más para sumarle a la ciudad.



Fotos:
1. Entrada al Regimiento 7 en el año 1930.

2. Boca del túnel sellada, antes de comenzar las obras.
3. Bajando al túnel, luego de que fueran limpiados parte de los escombros.
4. Las escaleras de acceso estaban tapadas por basura y escombros, tal como dijo Reynal.
5.
Interior del túnel inundado, tal como se lo encontró al ingresar por primera vez en marzo de 2010.

Fuentes:
Blog “Túneles en la ciudad de La Plata
“La historia oculta de la ciudad de La Plata”, Gualberto Reynal
“Mitos platenses”, por Roberto Abrodos
“Una plaza muy esperada”, Diario El Día, 31/8/1990
“La plaza en el ex-Regimiento 7º viene marchando a paso lento”, Diario El Día, 31/8/1990
“Desenterrando historias”, Diario Hoy, 6/11/2009
“Piden poder cavar en los míticos túneles y crear un paseo cultural”, Diario El Día, 8/3/2010
“Hallan un túnel subterráneo en el centro de la plaza Islas Malvinas”, Diario El Día, 29/3/2010
“Preparan documental sobre los túneles”, Diario El Día, 12/7/2010

3 de agosto de 2010

Un túnel en 7 y 49

Durante las remodelaciones del Pasaje Dardo Rocha, al levantar un antiguo piso de madera los obreros que trabajaban allí encontraron el día 21 de febrero de 1997 un pozo en el ala de 7 y 49, del cual desconocían su existencia.

Las obras en
el Pasaje se detuvieron por un tiempo para poder excavar ese pozo de 1,80m de alto por 1,20m de ancho. Quienes ingresaron pudieron avanzar unos 2 metros hacia el lado de la avenida 7, en donde se encontraron con una pared de ladrillos que les impedía continuar. Es así que empezó a correr el rumor de que ese foso sería en realidad un túnel que comunicaba el Pasaje Dardo Rocha (que antiguamente era la estación de trenes “19 de noviembre”) con el edificio del Banco Hipotecario que se encuentra al otro lado del a avenida 7.

Las autoridades mantuvieron reuniones con los antiguos empleados del telégrafo (que antes funcionaba en el Pasaje Dardo Rocha) y ellos afirmaron que estaban enterados de la existencia de ese lugar ya que allí antiguamente funcionaba un vestuario del personal. En cuanto a la pared de ladrillos, también conocían el mito de un túnel hasta el Banco Hipotecario pero ignoraban si era cierto o no.

Finalmente
no pudo verificarse si esa pared era parte del edificio del Pasaje Dardo Rocha o un tabique hacia el supuesto túnel, ya que las obras se interrumpieron ante la posibilidad de dañar la vereda sobre la avenida 7. Lo que se decidió fue dejar el lugar despejado para futuras investigaciones arqueológicas en el lugar, tras lo cual se colocó encima el actual piso del edificio.

Aunque no se pudo comprobar si este
mito era cierto o no, hay historiadores que lo niegan ya que el Pasaje Dardo Rocha funcionó como estacíon del tren hasta el año 1906, y el edificio del Banco Hipotecario se construyó 22 años después, en 1928, por lo que el "túnel" para llevar el dinero del banco hasta la estación de trenes sería otro mito más.


Fotos:
1. En azul se ve la extensión del supuesto túnel, cruzando avenida 7 desde el Pasaje Dardo Rocha hasta el Banco Hipotecario.
2. Estación 19 de Noviembre (actual Pasaje Dardo Rocha) en 1890.
3. Foto antigua del Banco Hipotecario.
4, 5, 6 y 7. Fotos del pozo hallado durante las obras en el Pasaje Dardo Rocha y de la pared que bloquearía el acceso hasta el Banco Hipotecario.

Fuentes:
Blog “Túneles en la ciudad de La Plata
“¿Un túnel en el Pasaje Rocha?”, Diario El Día, 22/2/1997
“La comuna estudia qué hacer con el túnel del Pasaje Dardo Rocha”, Diario El Día, 25/2/1997
“Túneles que nunca se vieron”, Diario El Día, 7/10/2001
“Fantasmas de antaño se pasean por La Plata”, Diario Hoy, 9/5/1999
“Supuestos túneles secretos en pleno centro”, Diario Hoy, 8/7/1997
“Desenterrando historias”, Diario Hoy, 11/11/2009